El cuerpo astronómico más cercano que podría afecta a la Tierra de forma preocupante es el Sol. Mientras este no cambie en cuanto a sus niveles de actividad no afectará de mayor manera a nuestro planeta. Aunque se sabe que eventualmente habrán cambios y que afectarán a la Tierra.
Con el tiempo, el Sol se convertirá en una gigante roja, cuando eso ocurra puede que la Tierra se convierta en una ascua, que es un material que arde sin dar flama, y luego se vaporice. Se espera que esto ocurra en unos cinco mil millones de años, aproximadamente.
La NASA captó la destrucción de un sistema solar mediante el telescopio espacial Kepler y de ahí pudieron darse una idea de lo que ocurriría con nuestro propio sistema. Lo que ellos encontraron fue un planeta rocoso orbitando una enana blanca, una estrella que se ha quedado sin combustible, en la constelación de Virgo a alrededor de 570 años luz de la Tierra.
Este bien puede ser el final astronómico pero una cosa aparte es el final de la vida en nuestro planeta. El astrobiólogo Jack O'Malley-James cree que la vida en el planeta llegará a su final debido a la reducción de CO2, ya que esto provocaría que las plantas mueran y luego seguirían los herbívoros y carnívoros.
Científicos buscan reducir los gases de efecto invernadero y el calentamiento global. Esto también tiene que ver con el envejecimiento del Sol, el cual se calienta cada vez más y provoca la reducción del dióxido de carbono. Se espera que esto ocurra en menos de mil millones de años. Probablemente los únicos seres vivos que permanezcan sean los microbios e insectos muy resistentes, como las cucarachas.
De cualquier forma, probablemente el humano no llegue a presenciar eso.
Por Saphira Kailen
Más información en: https://youtu.be/-RWm7xYDybk
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